Los nuevos horizontes de CHANEL Haute Couture
Virgine Viard supo cómo mantener las miradas de su público en la pasarela. La nueva propuesta de Alta Costura dio un giro en 180º y demostró cómo la casa de moda se aproxima a un nuevo futuro.
Elegantemente, la actriz estadounidense Margaret Qualley abrió el desfile de la maison francesa luciendo una nueva propuesta que se escapa de los códigos tradicionales de su fundadora, Coco Chanel. Con mucho color blanco, tonos primaverales —entre ellos palo rosa, verde menta, lila, gris perla, y un amarillo más palido— retales de tul, tweed, transparencias, y el juego de diversas capas, poco a poco se comenzó a vislumbrar el futuro de la casa; la mezcla perfecta entre su savoir-faire y la mente creativa de la directora creativa.
Sin duda, los vestidos y las distintas prendas fueron joyas únicas que destacaron la figura femenina de las modelos. Con un toque de ballet y moda japonesa, se combinaron medias blancas con faldas midi, pantalones transparentes y bordados, chaquetas con cuellos circenses, top de hombros descubiertos, bodys con pedrería y mucho más.
El argumento de esta esperada propuesta se dio a conocer en el cortometraje escrito y dirigido por Dave Free, protagonizado por la mismísima Qualley, bajo la música de Kendrick Lamar. Titulado The Button, muestra cómo la musa sale en búsqueda del botón extraviado para llegar a la emblemática dirección, 31 Rue Cambom, al encuentro con la house ambassador, Anna Mouglalis. “La belleza dentro de las imperfecciones del tiempo”, le dice al coser la pieza faltante.
