Aromas biográficos
Paloma Espinoza compone fragancias a partir de plantas aromáticas. En Perfumería Botánica crea no solo perfumes naturales, sino también esencias personalizadas que traen al presente recuerdos del pasado.
Desde su taller ubicado en una casa antigua en Ñuñoa emerge una mezcla de esencias silvestres. Adentro abundan plantas enfrascadas, soluciones aromáticas de diversos tipos y toda clase de aromas. Paloma Espinoza es dueña de un laboratorio artesanal, su propia Perfumería Botánica, que es el lugar donde trabaja y habita. Desde su infancia, esta creadora desarrolló una particular sensibilidad por la naturaleza, en gran medida debido a una vida rodeada de la flora y fauna de la Patagonia chilena. Como miembro de una familia de artistas visuales, también aprendió a apreciar y observar estos espacios silvestres con gran detalle. Su primer acercamiento al mundo de los aromas se produjo en Bélgica, en 2002, cuando conoció la aromaterapia científica como una alternativa para el cuidado de su embarazo. En su regreso a Chile y posteriores viajes, fue introduciéndose en otras disciplinas e instruyéndose con grandes maestros sobre los inagotables usos de las plantas aromáticas y aceites esenciales, para finalmente llegar a descubrir su verdadera pasión: la perfumería.
Según explica, trabajar con aromas naturales es un deleite. “Lo tienen todo: poder, energía y un mensaje ancestral, acompañado también por un contexto histórico y cultural que se vive en torno a la planta”, manifiesta. También reconoce que detrás de este arte existe un lujo y exclusividad muy evidentes. “No hay otro oficio donde se trabaje con un material tan caro. Ni siquiera la joyería se le acerca”, explica. De este componente se requiere un gran volumen, además de tiempo y dedicación, que van desde el cultivo hasta la extracción de sus fragancias. A esto se añade la variación que las plantas sufren en la producción de sus aromas, según el entorno. Para esta fabricante de fragancias, a ratos su oficio puede ser particularmente complejo, ya que tanto en Chile como en Sudamérica no existe un repertorio muy variado en cuanto a plantas aromáticas, por eso trae sus esencias de rincones exóticos como Madagascar, principal productor de aromas naturales y un foco importante para la industria mundial de la perfumería.
Luego del largo proceso de obtención de este material transparente, recién se puede comenzar a fabricar la estructura del perfume. Esta labor, como Paloma la describe, además de ser muy delicada, es un arte en sí misma. Y es que tal como lo haría un músico, el perfumista debe partir de una inspiración. Para concretarla debe ocupar notas. Estas tienen distintas afinidades entre sí. Una vez que se logra una armonía, surgen los acordes de esencias y se crea una nueva fórmula. Un perfume único.
ENCUENTROS AROMATICOS PERSONALES
Una de las particularidades de Perfumería Botánica es la creación de sesiones olfativas. En estos encuentros, los asistentes se someten a una verdadera cata de notas aromáticas bajo una determinada estructura. Luego -y según sus preferencias personales de olores- Paloma arma una fragancia única y personalizada para cada participante. Lo llamativo es que esta experiencia también puede ir más allá de un perfume tradicional, ya que siempre hay quienes llegan con la idea de recrear aromas de su infancia o de recordar a alguna persona importante. Tan especial es lo que se logra en cada sesión que, en ocasiones, estos encuentros de estimulación sensorial pueden tener un efecto emocional muy intenso. “Se abre una información muy íntima en las personas. Es una llave superpoderosa que te puede llevar a muchos lugares”, asegura la perfumista.
Para lograr un buen desarrollo de estos encuentros, Paloma creó un libro interactivo que ayuda a los asistentes a conocer mejor los aromas que quieren traer al presente. El texto se llama Memoria Olfativa y, a través de cinco capítulos cortos que contienen ejercicios personales, su creadora pretende estimular el lenguaje olfativo de los participantes, a quienes les pide recordar olores que hayan marcado sus biografías. “Desde aquí surge mi interés en explorar la respuesta de cada individuo para la creación de perfumes biográficos, develando en el diseño de un aroma las características íntimas de una persona y que el resultado sea algo significativo y representativo de sí mismos”, puntualiza.