En el jardín de Christian Dior
En una invitación exclusiva para amigas de la marca, Dior celebró el día de la madre al aire libre, en conmemoración al jardín francés donde el diseñador se enamoró de las flores.
Ubicada en Normandía, Francia, la Villa Les Rhumbs fue construida a finales del siglo XIX y debe su nombre al antiguo término marino "Rhumb" -que designa una rosa de los vientos-, símbolo que aparece como adorno en el suelo de mosaico en una de las entradas de la casa.
Los padres del diseñador Christian Dior compraron esta gran casa en 1905 y el lugar pronto se transformó en el origen de los mejores recuerdos de su infancia. En su autobriografía, Dior by Dior, escribió: "Tengo los recuerdos más tiernos y asombrosos de la casa de mi infancia. Incluso diría que mi vida y mi estilo se lo deben casi todo ese sitio y su arquitectura".
Fue ahí, en Villa Les Rhumbs, que Dior se enamoró de las flores del jardín que cultivaba su madre Madeleine. Por lo mismo, ¿qué mejor forma de celebrar el legado de Dior y, al mismo tiempo, el día de la madre, que al aire libre y rodeadas de flores?
Inspirado en el jardín de la infancia de Christian, Dior invitó a cerca de 30 amigas de la marca a un exclusivo brunch para madres e hijas. Con aires primaverales en pleno otoño, el grupo disfrutó de una tarde soleada al más puro estilo francés, que incluso contó con una tarotista experta para quienes quisieran leerse las cartas.
Por si fuera poco, el evento contó con la presencia del perfumista Pablo Schenfeld, parte del pro-team de Fragancias de Dior, quien fue el responsable de recordar el legado del jardín de Granville, en la Villa Les Rhumbs, donde el diseñador compartió junto a su madre la pasión por las flores.
