Gucci Cruise 2025 en Tate Modern: "Siempre nos quedará Londres"
Sabato de Sarno regresa a los orígenes de la casa de moda fundada a principios del siglo XX por Guccio Gucci. Desde el Londres victoriano hasta el contemporáneo, mezcló códigos estéticos para su nueva colección Crucero 2025.
Al estudiar el estilo de vida de estas personas, consiguió no solo crear objetos que perduran en el tiempo y se adaptan a sus necesidades, sino también una singularidad propia y un código estético preciso. “Siempre nos quedará Londres”, reza el título del desfile Crucero 2025 de Gucci; un regreso a la capital inglesa muy deseado por el director creativo Sabato De Sarno, que tras su debut el pasado septiembre para la colección Primavera-Verano 2024, presentó su primer desfile Cruise.
El espectáculo giró en torno al tema de las dicotomías: rigor y extravagancia, solidez en la delicadeza, estilo británico con ecos italianos. Los trajes combinan con la ropa de trabajo, la ropa de calle y la ropa de noche. "Al desviarlos, utilizamos los códigos como herramienta de provocación", explicó el director creativo. Como prendas exteriores, las gabardinas se yuxtaponen a estampados que dibujan tallos de manzanilla salvaje en la ropa; bordados realizados en organza cortada con láser; y lentejuelas que se mueven libremente por el cuerpo. Luego la gasa, los volantes y el encaje.
Aquí no hay prêt-à-porter sin denim. Sabato De Sarno opta por un corte holgado que termina en bailarinas y creepers; el diseñador adoptó el balletcore, en contraste con las plataformas altas de la colección Ancora. Los símbolos del estilo británico —tartanes, tradición sartorial— y los emblemas de Gucci, se reinventan infundidos con una nueva energía para una generación diferente. “Inspirado en la Italia de principios de los años 70”, el bolso Gucci Blondie, de piel y lona, “contrapone preciosismo y utilitarismo: llevado al hombro, su emblemático logo está revestido de piel o aplicado con una técnica tomada de la joyería Gucci".